El precio de una vivienda no es la única cifra que hay que tener en cuenta a la hora de afrontar una operación tan importante, hay más gastos al comprar una casa. Tanto compradores como vendedores deben afrontar diferentes impuestos, honorarios y trámites, por lo que es habitual que existan dudas sobre estos trámites para comprar una casa, más cuando se trata de compradores que llegan de otros países.
Por eso es muy importante analizar todos los gastos a la hora de comprar una casa, más allá del precio del inmueble y conocer quien paga los impuestos en una compraventa. Las variables son muchas: impuesto de actos jurídicos, cambio de titularidad, si la vivienda es de segunda mano, el préstamo hipotecario (de ser necesario) y un largo Etc.
Para arrojar un poco de luz sobre este tema, recogemos algunas de las consultas más frecuentes que atiende David de Gea en su actividad inmobiliaria en HousinGo:
Impuestos al comprar una casa: ¿puedo ahorrarme impuestos?
Los compradores deben pagar el Impuesto sobre las Transmisiones Patrimoniales (ITP). En el caso de Madrid, por ejemplo, es un 6% del valor de la vivienda. Los inversores tienen la oportunidad de pagar solo un 2% cuando su objeto social sea precisamente la compra venta o la inversión inmobiliaria. Pero eso sí, deben volver a vender la propiedad en los siguientes 3 años, de lo contrario se deberá abonar el 4% restante del tributo.
Este es uno de los impuestos de compraventa de un inmueble que deben tener en cuenta especialmente los compradores extranjeros, ya que no están tan familiarizados con los cambios impositivos según la comunidad autónoma.
Un punto importante, dado el gran incremento de compradores procedentes de países de Latinoamérica, que buscan en muchas ocasiones viviendas de más de un millón de euros en zonas como el madrileño Barrio de Salamanca.
Madrid tiene el ITP reducido más bajo de España. Este tipo impositivo, que es del 2% se aplica a empresas que sean de aplicación las normas de adaptación del Plan General de Contabilidad del Sector Inmobiliario (esto también pasa en Andalucia).
El ITP reducido incentiva la inversión en inmobiliario. Se acogen a él empresas cuya actividad inmobiliaria pasa por tener en cartera el activo un máximo de 3 años (ya que si el plazo es mayor a 3 años, han de pagar la diferencia del 4% en la Comunidad de Madrid), por lo que fomenta el negocio de inversión inmobiliario y genera un mayor volumen de compraventas.
Impuestos y gastos al comprar una casa: Ojo con la plusvalía
El vendedor debe pagar la plusvalía municipal o Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos. En este caso, el coste puede variar considerablemente, según haya variado el valor en el tiempo que se haya sido propietario.
El vendedor también deberá tener en cuenta la ganancia patrimonial obtenida para estar al día con Hacienda en el ejercicio correspondiente.
Gastos extras al comprar una casa
No hay que olvidar tampoco que se deben pagar gastos denominados "de gestión". Veamos cuáles son.
Gastos de notaría
Formalización de escritura pública ante notario: Dicho gasto se encuentra regulado por ley y ronda entre el 0,2% y el 0,5% del valor total del inmueble. Sus honorarios están regulados, pero es importante contar con un profesional de confianza para llevar la operación. También se puede optar por la ayuda de una Gestoría, que a su vez cobra sus honorarios, y prever que habrá que pagar el trámite ante el registro de la propiedad.
Gastos de gestoría
Incluye servicios como la inscripción en el Registro de la Propiedad. No es obligatorio contratar a una gestoría, ya que lo puede hacer el mismo comprador. Los honorarios de la gestoría son libres, pero lo habitual es que cobren entre 300 y 500 euros en función del precio de la compraventa.
En cuanto a las agencias inmobiliarias, son los vendedores quienes abonan entre el 3 y el 5% a los profesionales que los acompañan en la operación.
Recomendación general de David de Gea
Se debe contar con una visión global de la operación, analizar todos los detalles y sumar previamente todo lo que realmente va unido a comprar una vivienda: la fiscalidad, los gastos, la hipoteca, pero también si se va a necesitar una reforma o incluso amueblar la casa.